La primera vez, es la primera vez que me pertenezco. No se bien porqué. Solo sé, que ahora no soy yo la que pierde el control, la que se deja llevar, la que sufre. Disfruto sabiendo que tengo entero control de mi misma, de mis sentimientos. O al menos por ahora. Porque cada vez es más difícil hacerme daño. Pero, ¿No es esa una de las facultades de la vida?...La evolución...
Evolucionamos con el fuego, con la escritura, con la electricidad... pero, sin embargo, seguirán pasando miles de años, que lo que más nos costará evolucionar será nuestro interior, porque somos imperfectos, impredecibles, y sobre todo vulnerables.
Pero a pesar de ello, somos nosotros los que decidimos quien nos puede herir. Nosotros otorgamos ese poder. Y una vez entregado, rezamos, suplicamos y rechazamos pensamientos como quien rechaza la muerte.
Susurramos "Hay que vivir el momento", decimos "Soy feliz y eso es lo que importa".
Pero, ¿acabaremos muriendo de vejez o de pena?.
No hay comentarios:
Publicar un comentario